Cuentan que San Nicolás fue un sacerdote nacido en Mira (Turquía) que dedicó su vida a ayudar a los necesitados, especialmente a los niños.
Dicen que realizó milagros, sus rezos salvaron a unos niños que fueron acuchillados y a unos marineros que estaban perdidos en medio de una tormenta, por eso se le consideró como un santo.
La tradición de repartir regalos viene de una historia de tres niñas que no podían casarlas por no tener dote su padre, San Nicolás entro por la ventana y llenó de oro tres calcetines que estaban secándose junto a la chimenea.
La noche del 24 de diciembre coincide con el solsticio del invierno, cuando las noches se alargan y los horas de luz disminuyen. En esta noche se reunían las familias para estar juntos y se daban regalos a los niños.
Lo más lindo de esta tradición es el poder reunirse y poder hacer gestos de amor a través de regalos a las personas más cercanas. Porque no hace falta ser un niño para sentir la ilusión de hacer y de recibir un regalo.
En muchos hogares siempre se alumbran velas como parte de la tradición para dar luz durante esa noche.
Por eso queremos sugeriros como regalo especial regalar una vela perfumada, que no solo será un recuerdo de esa noche sino que quedará durante mucho tiempo más alumbrando y llenando de bellos aromas vuestros hogares.
En este post de La macedonia de Mariola os sugiere originales regalos, entre ellos nuestras velas. En The Luxonomist también nos nombran como un perfume a regalar en navidades.
Pódeis encontrarlas en nuestros puntos de venta y online en www.elparacaidista.com.
Mientras tanto os deseamos un bonito día a todos.